NUEZ NUEZ

Cayó en mi cabeza,

y dolió en el corazón.

Aún sueño con ella,

pero ella no es…, no es…

Me hizo ver las estrellas,

futuros desnudos con ella.

Cómo romperla quisiera,

pero ella no es…, no es…

Fue una flor, imagino…

pero endureció con el frío.

Y cayó lento (shhh), y calló lento (shhh)

Pero ella no es…, no es…

Qué dolor, y qué aroma.

Luego descansó en mi boca.

¿Será mi suerte que toca?

Pero ella no es…, no es…

Despertó mientras la miraba.

—Déjame seguir cayendo—, dijo.

Y aunque todo fue muy lindo,

ella no es…, no es…

Partió mi cabeza en trizas,

partió con sus ropas, de prisa.

Me topé en su desgraciada caída,

pero ella no es…, no es…

Isaac descubrió la gravedad,

yo, tristemente, la brevedad.

Me dejó para ella regresar,

porque ella no es…, no es…

En ese tiempo la amé,

tal vez nunca… nunca fue.

Por eso, fugaz, se fue,

porque ella no es…, no es…

Cayó de un árbol agresivo,

susurré suave en su oído:

“Estás protegida conmigo”.

Pero ella… nuez, nuez.

Quisiera que esté conmigo,

quisiera un bucle infinito.

Y aunque todo fue muy lindo,

ella no es…, no es…

Cayó en mi cabeza,

y dolió en el corazón.

Aún sueño con ella,

pero yo nuez…, nuez.

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José Rolando Ramos Quispetupa
Conocido como José Kukuchi, es licenciado en Ciencias de la Comunicación por la UNSAAC. Desde joven destacó en la música, la pintura y la literatura, publicando varios cuentos influenciados por el misterio y el terror. Combina su labor como docente universitario con su trabajo como productor musical, desarrollando proyectos en trap, blues y reggae. Su obra integra tradición y modernidad, consolidándose como un creador versátil y en constante evolución.