Por: Aarón Alva

Es grato encontrar apuestas literarias que desde su forma buscan renovar y refrescar un género local tan característico (y a la vez gastado), como el urbano. Esto es evidente en entregas de autores locales menores de cuarenta años que, atendiendo a su contexto y época, plasman nuevos códigos y posibilidades del citado género. Es el caso de Orlando Quevedo con su reciente novela Al pie de las hambres, publicada por Editorial Colmillo Blanco.

La obra, de corto aliento, cuenta la historia de Remigio, un poblador de la zona conocida como “El Porvenir” en San Juan de Lurigancho, cuya familia de bajos recursos se ve envuelta en problemas disfuncionales a causa de la muerte del padre, la conducta demencial y abusiva de Víctor, hermano de Remigio, y la decisión suicida de Espíritu, la madre. A ellos se suman Asunción (hermana de Remigio), la tía Maritza, y vecinos involucrados en el cause emocional familiar; y a ello se añade también la discapacidad de habla y movimiento del protagonista, quien vende caramelos en una silla de ruedas. A primera impresión, lo dicho podría sonar a típica historia de realismo urbano que pretende explotar atributos locales de “exportación” para un ojo extranjero. Sin embargo, el principal acierto de Quevedo es la búsqueda de una identidad propia dentro de una trama tan gastada, la cual consigue mediante la voz narrativa y el plano de realidad planteado en su obra. A través de un lenguaje poético y sin engalanamientos fuera de lugar, el protagonista recrea los hechos y sobre todo las personalidades ajenas a él desde una dimensión intima que equilibra con buen ojo lo que el resto dice y hace, y lo que él mismo es. Sus acciones, netamente contemplativas, dejan al resto hacer, mientras el lector se pregunta en qué momento Remigio hablará, o cómo es posible la existencia de tal voz a pesar de su discapacidad, la misma que no muestra una mejora a lo largo del libro; pues ello será revelado de un modo que incluye la sorpresa sin efectismos, ya que es construida paulatinamente con solvencia.

Por otro lado, el tema del suicidio es tratado con cuidado. No cae en lo forzado y gratuito. Los motivos de Espíritu (madre de Remigio) se apoyan en una vida que incluso antes de la muerte de su esposo parece estar condenada a la muerte. A su vez, la escena del entierro de Remigio, sin que este fallezca, adquiere un aire mítico: el descenso y posterior ascenso desde el inframundo hacia una nueva vida que, irónicamente, conducirá a un nuevo tipo de muerte, donde la voz y percepción del protagonista alcanzarán una especie de estado supremo.

Por supuesto, existen puntos algo flojos, como los monólogos de Asunción, por momentos exagerados y un tanto edulcorados, y la oralidad real en los diálogos de Víctor. Más allá de eso, nada que ensucie el conjunto.

Buen libro.

Ficha técnica:

Al pie de las hambres, de Orlando Quevedo

Editorial: Colmillo Blanco

130 páginas

Tapa rústica

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