El pintor Walter Mamani actualmente vive y estudia en Francia, país donde realizará su primera exposición individual, este próximo martes 6 de noviembre en la Galería Dolet (22 Rue Etienne-Dolet, Clermont-Ferrand). A continuación, compartimos esta interesante entrevista, realizada por Lucía Portocarrero.

Mi primer acercamiento artístico fueron unos librillos de arte que vendían los ambulantes a las afueras del colegio Guadalupe que los miraba cada noche retornando a mi casa del trabajo o alguna reunión con amigos y que bien, después de algunas noches sucumbía a comprarlos, lo bueno que en aquel entonces me costaban un sol cincuenta cada uno.

Algunos testimonios de pintores peruanos con respecto a la vida que atravesaron son los que indirectamente me influenciaron o mejor dicho, me motivaron; sus triunfos y derrotas, sus alegrías, preocupaciones y sus penas; y a pesar de ello seguir blandiendo el pincel sobre el lienzo sin que nada les doblegue, mantenerse firme ante las adversidades. Sobre todo el acto mismo de amar es, pienso yo, mi mayor motivación.

Con respecto al oficio, adquirí las nociones en un pequeño taller de pueblo libre, era en el tiempo que estaba postulando a las universidades estatales. Por otra parte los museos que se encontraban caminando en mi trayecto hacia los alrededores del congreso para comprar mis materiales son los que también contribuyeron en mi aprendizaje, pues eran gratuitos o en todo caso a un precio muy accesibles, allí yo podía detenerme buen tiempo a observar detenidamente cada obra, ver sus trazos y sus colores, etc.

Primordialmente la lucha conmigo mismo sobre el lienzo fue lo que me enseñó desde un inicio, y después las charlas con mis amigos, en aquellas conversaciones me enteraba de algunas experiencias tanto con el trato del material como las visiones personales sea dentro del ámbito artístico como también el ámbito social, todo esto es y sigue siendo bien enriquecedor para mí, no provengo de ninguna casa enfocada a las artes plásticas lamentablemente.

Yo pinto la vida misma, entonces, mi necesidad real de crear el cual debo de satisfacer, prioriza que tema debo abordar inmediatamente y esto es debido a las circunstancias o momento en el que vivo, por lo tanto, los otros temas deben esperar a ser abordados después por mi pincel.

Yo pienso que es el trazo y los colores puros, en realidad, no veo que tenga una característica innata mi trabajo, que marque una notable diferencia a los recursos artísticos que conocemos hasta hoy en día, es evidente para el espectador que hasta este momento, mi trabajo está ligado a los estilos del siglo anterior, en ese caso puedo decir, que sigo la tradición pictórica como de alguna manera inconsciente de demostrar que yo continuo esta línea de creadores el cual empezó desde las pinturas rupestres(las cuales podemos apreciarlas en Toquepala), es comprensible para mí que no sea al gusto actual que impone e influye la enseñanza y demanda del mercado artístico peruano, todos debemos comer y pagar facturas.

Por otro lado, no me siento atraído de mantener un estilo de pintar, de repetirme siempre, uso los recursos que necesite inmediatamente para plasmar sobre el lienzo lo que intento comunicar.

El sentir y la necesidad de tener más pretextos para continuar pintando.

Les quiero comunicar todo lo que involucra en el desarrollo de nuestra vida y sobre todo en la época que vivimos.

“Retrato antes de fiestas”, el que estoy utilizando como portada de mi exposición.

Estaré inaugurando mi primera exposición individual, en Francia, este próximo martes 6 de noviembre en la Galeria Dolet (22 Rue Etienne-Dolet, Clermont-Ferrand), para inicios del próximo año estaré participando en una exposición colectiva y entre otros proyectos más que estaré involucrado en el transcurso del 2019 el cual pronto les comunicare.