Pinté letras del alfabeto gracias a un lenguaje artístico propio; formando palabras, legibles o no, que plasman mis vivencias o emociones.

Por Lucía Portocarrero

Tengo el agrado de compartirles esta entrevista realizada al artista francés-austríaco, Mathieu L’Hôte, quien nos comparte su interesante lenguaje artístico denominado “expresionismo létrico”. Actualmente exhibe su muestra individual titulada «LETRAS» está visible actualmente y pueden visitarla hasta el 26 de diciembre en la galería de arte de la Alianza Francesa. ¡De manera presencial! El proyecto ha sido uno de los seleccionados en la convocatoria pública de artes visuales de dicha institución. A continuación la entrevista:

¿Desde cuándo sientes interés por la pintura?

Siento interés por la pintura desde niño. En aquel tiempo vivíamos a una hora de París en un bello pueblo a orillas del río Sena. Del otro lado, el pueblo esta bordeado por el bosque de Fontainebleau, el cual tiene formaciones rocosas en arenisca muy particulares que siempre me marcaron. Cuando íbamos a París por carretera o en tren, me quedaba pegado a las lunas. Había muchas letras, firmas, pintadas en las paredes, a veces sobre los trenes. Descifrarlas era un ejercicio fabuloso. El graffiti. Es en la misma época, aun niño, qué empecé a dibujar. Pasaba largos momentos dibujando letras y personajes que reproducía en serie.  Espontáneamente empezaba a analizar nociones como el punto de fuga, las sombras, los planos y las diferentes alianzas de colores.

 ¿Tuviste influencia de algún familiar para sentir y apreciar el arte?

En mi familia, se valora el arte y la artesanía desde siempre, al igual que la belleza de los paisajes o la rareza de momentos particulares. Recuerdo que se nos incitaba a darnos cuenta de la belleza de un objeto, una obra o de un paisaje y a contemplarlo. Saber apreciar el momento presente. En la casa siempre he visto piezas de arte hechas por miembros de la familia: objetos en madera, pequeñas esculturas, pinturas. La música también siempre estuvo presente pues mi padre es músico, recuerdo tardes en las que tocaban durante horas con mi hermano, el método del picking de Marcel Dadi, acordes de Francis Cabrel etcétera. Siempre sonaba música: jazz gitano, Carlos Santana, polifonías corsas o canción francesa con Hugues Aufray, Alain Souchon, Georges Brassens…Lo considero un conjunto que mezcla influencias reales, con recuerdos, emociones.

Si bien en mi caso parte de la influencia para sentir y apreciar el arte ha venido desde la familia y desde joven, pienso que el mundo exterior también ha sido parte de ello.

En la adolescencia, los momentos en los cuales empecé a pintar mis primeros muros con los “mayores” y los amigos fueron bastante formativos, también en la manera de vivir y disfrutar esa pasión, el graffiti, la cual yo aún no consideraba arte. Otra influencia hubiera podido ser las clases de arte que se impartan en el programa escolar en Francia, pero recuerdo que estaba demasiado concentrado en dibujar y afilar mis letras.

En el Perú ¿Consideras que se puede vivir de la Pintura?

Sí, considero que se puede vivir de la pintura en Perú. Por suerte para los pintores, aquí hay mucho polvo y bastante contaminación en el aire. Por otro lado, en el caso de Lima, no hay lluvia. En muchos lugares la lluvia es un modo natural y automático de limpieza. Estos dos elementos hacen que siempre se necesitan volver a pintar las paredes y las fachadas e inclusive el pavimento.  ¡En Perú hay mucho trabajo para los pintores! ¡Saquen sus pinceles y sus brochas!

 Aparte del tecnicismo logrado, ¿consideras que existe algo más que te haya enseñado en el proceso de pintar y crear?

La experiencia de la vida. Vivir momentos y conocer personas, nuevos lugares. Parte de lo que busco es vivir momentos, analizarlos, para que se me queden en memoria. No siempre son momentos agradables, como dice Viktor Frankl « el sufrimiento es parte sustancial de la vida, como el destino y la muerte ». A partir de esta base de datos conformada por vivencias, recuerdos, sensaciones o emociones vienen los elementos que nutren mi creación y mi pintura.

También me parece interesante el dialogo con pintores y artistas actuales, tanto como el estudio de maestros consagrados (pintores o artistas de otros rubros). Disfrutar obras de otras disciplinas artísticas siempre me ha parecido enriquecedor.

En «LETRAS», mi última muestra, la mayoría de los cuadros, sobre todo los de gran formato, se construyeron de esa manera, partiendo de letras, y moldeándolas de una manera pensada, construida diría. Yo lo llamo “expresionismo létrico”.

Si tuvieras que elegir entre todas las pinturas del mundo ¿Con cuál te quedarías?

Me quedaría con la pintura rupestre. El hecho mismo que estas pinturas, por su presencia y por el testimonio que representan, pertenecen a toda la Humanidad.

Para mí el hecho de pintar sobre paredes tiene un eco particular porque la filiación del graffiti -u otros tipos de pinturas murales- con la pintura rupestre es evidente. Es una significación que considero muy importante y que me sigue intrigando; a menudo tengo reflexiones sobre estas temáticas. En varias oportunidades el maestro Soulages comenta del arte rupestre que «lo impresionante no es que la pintura prehistórica sea el origen de lo que ahora llamamos arte, sino que un hombre haya hecho este gesto, pintar, gesto que demuestra simplemente, fuertemente un imperioso deseo de marcar una presencia. »

Tuve la oportunidad de visitar la cueva de Lascaux en Francia, y también las cuevas de Gargas hace unos años, donde me marcaron “las manos en negativo”. En Perú quise ver las pinturas parietales situadas en las Lomas de Lúcumo (cerca de Pachacámac) pero a pesar de estar atento nunca las encontré, no había indicaciones.

¿Sientes un tipo de conexión personal con alguna de tus obras?

Siento una conexión personal con todas mis obras, pienso que cada obra de un artista es un testimonio de su sentir, su pensar en un momento definido. En la muestra actual seria con la pintura «Limeña noche» que, además, es el afiche de la exposición. Esta pintura es un homenaje a las salidas nocturnas, a todo lo que se puede ver y sentir en estos momentos de los cuales, de hecho, estamos privados desde que entramos en la pandemia… Un otro cuadro con el cual siento una conexión fuerte es «La angustia» que es una suerte de llamada de atención al estado de degradación de nuestro planeta por la actividad humana. Un tema sumamente presente que la mayoría de las personas de mi generación nos estamos tomando muy en serio.

Es interesante cómo representas tu obra con las letras, entre lo expresionista y abstracto.

Mi pintura podría denominarse abstracta, aunque en la mayoría de mis trabajos represento letras, de diferentes maneras. Invierto sentidos, distorsiono las líneas y balanceo proporciones para llegar a lo esperado. En «LETRAS», mi última muestra, la mayoría de los cuadros, sobre todo los de gran formato, se construyeron de esa manera, partiendo de letras, y moldeándolas de una manera pensada, construida diría. Yo lo llamo “expresionismo létrico”. Pero solo son palabras (risas), lo que verdaderamente cuenta son las emociones. Siempre presto una atención particular al color, el cual considero una herramienta importante en mi pintura, hasta el momento.

No obstante, en algunos trabajos practico una pintura mas instintiva, del “ahora” con toda la energía que vehicula el momento presente. Salen gestos, caligrafías en donde el ritmo y el equilibrio predominan. Son trabajos en los cuales un falso paso me obliga a abandonar. En la práctica, hay una semejanza con el hecho de colocar tags en la calle; si sale mal, ya no se puede borrar ni retocar. En la muestra actual, presento dos obras de este tipo, que son como hojas de escritura donde se desarrollaron caligrafías propias.

 ¿Hasta cuándo podemos visitar tu exposición “Letras”?

«LETRAS» esta visible actualmente y hasta el 26 de diciembre en la galería de arte de la Alianza Francesa. ¡De manera presencial! El proyecto ha sido uno de los seleccionados en la convocatoria pública de artes visuales de dicha institución.

La exposición invita al visitante a una inmersión en el mundo interior del artista a través de lienzos de gran formato donde el aerosol, el acrílico y el pastel graso ofrecen composiciones generosas en pintura y en color; el cual, nos otorga algunas notas alegres dentro del periodo que vivimos. Por la forma de la galería, que es cuadrada, y el tamaño de las obras, la idea es de proveer una experiencia visual intensa en donde el color tiene un papel importante. Pinté letras del alfabeto gracias a un lenguaje artístico propio; formando palabras, legibles o no, que plasman mis vivencias o emociones.

Paralelamente al aspecto visual, el otro objetivo de esta exposición es de ofrecer una experiencia literaria e inclusive auditiva. De ahí viene el titulo de la muestra, que es un uso doble de la palabra «LETRAS»: por un lado, hace referencia a las letras del alfabeto y por el otro, a las letras de canciones. Siendo yo un arduo consumidor de rap, y en general de canción de autor, quería que estén presente en la exposición los textos -en español y en francés- de algunas canciones que me marcaron y/o inspiraron en mi trabajo y en mi vida. He desarrollado la museografía de manera que las pinturas dialogan con textos de Charles Aznavour, de Dolores Delirio y otros más.  Asimismo, la tecnología permite escuchar las canciones durante la visita, de manera libre y gratuita.

 «LETRAS» es una experiencia para interactuar con la pintura, la lectura y la música.

¡Los espero hasta el sábado 26 de diciembre!

 Cuéntanos sobre tus actuales actividades y próximos proyectos o presentaciones.

Por el momento estoy concentrado en mi exposición individual, en difundirla y hacer que la gente vaya a visitarla. Dado el contexto actual, es un reto interesante que estoy asumiendo con bastante energía. En paralelo, estoy desarrollando un proyecto que será diferente a lo que he venido haciendo; el cual, debería ver la luz en el primer trimestre de 2021. Este proyecto tendrá, de algún modo, una relación con los eventos que estamos viviendo y con el bicentenario del Perú, el país que aprendí a amar y del cual me siento parte.

Pueden seguir mi trabajo a través de la cuenta Instagram @mlhote91.

Gracias a Cuenta Artes por el espacio de expresión y por su trabajo de difusión del arte.

En la actualidad sigue alimentando su arte a través de la Historia, la arqueología, el cine y las experiencias vividas en el bello (in)mundo que le rodea.

Sobre el artista:

Nació en Ajaccio (Francia, 1991) Inició sus primeros dibujos sobre papel a los 8 años; su primer contacto con la pintura fue el aerosol (spray) a los 11 años. L’Hôte pinta letras y colores sobre muros desde el 2002. Pintó su primer lienzo en el 2004. Con 21 años llega al Perú y descubre una cultura fascinante. Su curiosidad no tiene límites, en Lima se confronta a la urbe, la jungla urbana, la megalópolis. Al mismo tiempo los paisajes del país milenario llenan su mente de imágenes, su historia le transporta. La lectura, las notas y, siempre, la observación de los paisajes, sean urbanos o naturales, son parte de su formación. En 2017, empieza a exponer su trabajo en Perú y en el extranjero. Resaltan su participación en una colectiva en el Latino Art Museum (California, EEUU, 2017), en la subasta de la UNESCO (Lima, 2018), su primera exposición individual “Urbanismo Matérico”, en La Sala (Lima, Perú) en el 2018. En el 2019 fue partícipe del gran homenaje por los 100 años de la escuela Bauhaus, organizado por el grupo ColorBox en Perú; en 2020 su participación a la iniciativa «Les Amis des Artistes», Francia. Su trabajo se encuentra en colecciones públicas y privadas en Europa y América.

Desde el 11 de noviembre hasta el 26 de diciembre 2020 presenta la exposición de pintura « LETRAS », de manera presencial, en la galería de la Alianza Francesa de La Molina.

“Costas del Norte Chico” pastel graso sobre lienzo, 150 x 120 cm.

“La angustia” (2020) acrílico, aerosol, pastel graso sobre lienzo, 150 x 120 cm.